El sector del ocio nocturno es uno de los más castigados por la pandemia de la Covid-19. Llevan desde el inicio del estado de alarma con las puertas cerradas y lo peor, sin ninguna fecha clave ni previsión de cuando podrán volver a la actividad. «Nosotros seguimos en plena pandemia», aseguraba este miércoles en la emisora de radio de Fuerteventura Hoy, el copropietario del pub Mambo Tropical en Puerto del Rosario. «Para los sectores de ocio nocturno y todos aquellos que nos dedicamos a las verbenas o las actuaciones al aire libre, la nueva normalidad no existe, es una estafa».
Daniel Miranda es además uno de los componentes de Grupo Bomba, formación que anunciaba recientemente su separación ante la prohibición generalizada de las verbenas y fiestas populares hasta, previsiblemente, después del verano. «Si a esta situación no se busca una solución, pronto caerán más grupos», apunta.
Con este escenario, el empresario y músico mostró su descontento y preocupación ante esta situación que viven ambos sectores y que él vive por partida doble. Confía en que pronto se pueda llegar a algún tipo de acuerdo o consenso. Mientras los bares, cafeterías y restaurantes pueden abrir, los pubs y discotecas permanecen cerrados en la isla. «No pedimos que nos dejen abrir al 100%, sabemos que estamos en un momento muy difícil, si tiene que ser con mascarillas, con un registro de los teléfonos por si hubiera un rebrote tener a todos contactados, lo que sea, será cuestión de acostumbrarse», afirma, después será el cliente el que decida acudir o no.
En lugares como Galicia desde este primer día de julio se permite la apertura de pubs y discotecas. Es precisamente en esta comunidad donde tenían 70 actuaciones ya contratadas en la gira de verano, que podría llegar a 90, eso significa tres meses actuando todos los días, contratos que se han venido abajo por completo, sumado a las cancelaciones de sus actuaciones desde el pasado carnaval, y que en el mejor de los casos, podrían recuperarse finalizando el año. Insostenible se mire por donde se mire.
«Son muchas las llamadas que recibimos, incluso de políticos de la isla, donde nos dicen que no se imaginan una Fuerteventura sin Grupo Bomba». Cuesta pensar en ello cuando la fiesta en la maxorata llevaba la firma impresa desde hace 18 años por esta agrupación, que cuenta además con una legión de seguidores y distintos club de fans.
¿LA MUERTE DE ESTOS SECTORES?
Así las cosas, a las evidentes pérdidas económicas hay que considerar que aquellos grupos, formaciones, orquestas o empresarios de pubs y discotecas que se acogieron a un ERTE se encuentran en una situación especialmente delicada. Tienen que afrontar los próximos meses el pago de las cuotas de la seguridad social de sus trabajadores, teniendo producción cero. Un panorama desolador que afecta solo en la isla de Fuerteventura a cientos de profesionales.
Puedes escuchar la entrevista completa en el siguiente enlace.