Ayer martes 6 de agosto los trabajadores del RIU Oliva Beach se concentraban frente a la puerta de entrada del hotel para hacer llegar a las administraciones su descontento por el bloqueo de la reforma de su centro de trabajo.
«Necesitamos urgentemente una solución que permita conservar todos nuestros puestos de trabajo. Son casi 20 meses en espera de una respuesta por parte de costas en Madrid», aseguran».
Los casi 400 empleados sintieron el respaldo de vecinos, familiares, turistas y compañeros de otros hoteles.